No hay dos cumpleaños que sean iguales, y no por la torta o el pastel o la nada, o por la simple -física-presencia de algunos invitados, o por el año que se agrega en la cifra de la edad...
Los cumpleaños me hacen pensar en todo lo que cambió nuestra vida, y en lo poco que parece doler si pensamos, si realmente pensamos, que ya no volveremos otra vez a ser como éramos.
Es curioso cómo pasa el tiempo sin que sintamos ciertos cambios, nos vamos adormeciendo ante ciertas ausencias, ya la sorpresa se vuelve rutina y la falta de 'algo' se rellena con otra cosa... Estuve mirando fotos viejas, momentos que ya no recordaba y en los que parecíamos -los de la foto- tan felices.
No hablo solamente de las frolas, o del curso, o de mis demás amigos; no quiero que suene a la queja de que 'ya nada es igual', que lo digo siempre y aunque no lo crean, no soy consciente de eso hasta llegar al punto de encontrarme en alguna situación que me remita a una persona, y entonces la quiero buscar y veo que mi mano ya no la alcanza y pienso, recuerdo, y 'sí, cierto, ya no está...'
Soy ingenua en ese sentido: sigo llamando, sigo buscando, sigo pensando y tratando de que estén.
Pasa que también cada uno tiene su propia vida, nuevas responsabilidades y gustos y amigos, y está perfecto. Y lo difícil es recordar a los viejos en el momento justo, por eso me parece sensata la idea de tolerar los olvidos (no me enojo si se olvidan de mi el dia de mi cumpleaños, el aniversario de la recepcion, o el finde que tienen libre y prefieren mirar la tele) pero tambien alimentar estas breves maneras de manifestarse.
Mis cambios en contacto con ustedes, vuestros cambios en contacto conmigo
-esa onda-
Leer lo que nos pasa día a día (yo, señorita frecuencia, reconozco que lo de 'día a día' significa 'mensualmente, con suerte') nos ayudará a saber en qué anda cada una, sería como ir sintiendo el recorrido nuevo que cada una emprende.
Yo insisto, terca, en no soltar a las personas; y sé que muchas veces yo misma hago cosas para alejarlas. Sé también que me duermo, no las llamo y se van o no puedo verlas o no tengo ganas - es preferible tenerme lejos cuando no tengo ganas-.Sé esas cosas, y sé también que a veces pareciera no quedar más que fotos de algunos buenos momentos.
Tenemos que hacer la nuestra, formarnos y caminar por donde queramos
-yo no tengo idea todavía, no estoy en un camino, estoy en un monte rodeada de luces, y prefiero quedarme sentadita tomando tereré-
Pero ver, en la vida, que existen ex-mejores amigos que ahora no se hablan, ver que personas que eran como hermanos hoy apenas se saludan o saben de la vida del otro, me da cosa; pienso "se habrán mentido cuando se decían que se querían? o eso de no hablarse ahora, no comunicarse, será por algo grave o por simple distancia y cosas que no se hablan?"
o quizá "bueno, siempre que llovió paró, chamiga...arrrrriiiiba"
Romi y yo nos seguiremos viendo casi diariamente -porque viré mi futro de manera histérica, irreflexiva, pero la verdad estoy conforme y hasta feliz-.
Anita se enfrenta a la vida universitaria allá en Sta Fé, y estaría lindo ver alguna foto -si es que llevó la cam- o leer alguna anécodta en el blog.
Bechi nunca escribió nada acá; pero sugiero a quien lea esto -Romi o Anita, porque nuestro multitudinario público no comenta ni tiene peso en las decisiones del blog- que incorporemos a más mujeres a esto, a saber: Eve, Eli, etc. -Pela no entra en esta categoría por tener maní-
El blog fue creciendo muy poco en este año que pasó, casi de manera enclenque y dispersa.
Pero, ¿por qué?... porque las que lo creamos nos sentábamos todas juntas, y era una cosa de locos: colegio, salidas, y blog... Llegabamos al punto de 'ya no sé que podría decir...'
Yo tuve la etapa más asquerosa de mis 18 años de vida -esta última semana me di cuenta que fui víctima de mí, pero afortunadamente...en proceso de recuperación-, asi que bastante mala onda muchas veces.
Ahora podemos nutrirlo con cosas nuevas, cosas que no podemos decirnos en persona o que quedan mejor en palabritas en l monitor.
A lo que voy, para ir cerrando porque hace calor y me pican los mosquitos:
distancia + cambios + 'bueno, ya fue' = chau tu amistad.
Hagamos esto con ganas y cuando se pueda: dar señales de vida, contar algo que el resto no sepa, decir pavadas -como esas cosas que se escribían en papelitos-, fotos de lo que vemos diariamente y que el resto no...
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1 comentario:
ni lo tenía en cuenta al aniversario del blog, pero si, yo apoyo la idea de q se unan otras personas, por mas q nuestros numerosos comentaristas no opinen lo mismo U.U
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